Joe Biden emitió un discurso sobre el Estado de la Unión donde aseguró que la democracia está amenazada y criticó a su adversario Donald Trump

En su discurso sobre el Estado de la Unión, el presidente Joe Biden aseguró que no ‘satanizará’ a la comunidad migrante diciendo que ‘envenenan la sangre de nuestro país’, como lo hizo el expresidente Donald Trump.

Me han dicho que mi predecesor llamó a los republicanos en el Congreso y exigió que bloquearan el proyecto de ley. Él siente que sería una victoria política para mí y un perdedor político para él. No se trata de él ni de mí. No voy a satanizar a los inmigrantes diciendo que ‘envenenan la sangre de nuestro país’ como dijo en sus propias palabras. No voy a separar familias

Aseguró que está listo para pelear y arreglar la frontera con México y habló sobre la ley bipartidista que propuso en conjunto con su equipo, que de ser aprobado, podría permitir la contratación de mil 500 agentes y oficiales de seguridad fronteriza, así como 100 jueces de inmigración más para ayudar a hacer frente a una carga de 2 millones de casos.

También 4 mil 300 oficiales de asilo más y nuevas políticas para que puedan resolver los casos en 6 meses en lugar de en 6 años; 100 máquinas más de detección de drogas de alta tecnología para aumentar significativamente la capacidad de detectar y detener a los vehículos de contrabando de fentanilo hacia Estados Unidos.

También me daría, como presidente, una nueva autoridad de emergencia para cerrar temporalmente la frontera cuando el número de migrantes en la frontera sea abrumador. Podemos pelear por la frontera, o podemos arreglarla. Estoy listo para arreglarlo. ¡Mándenme el proyecto de ley de la frontera ahora!

Democracia bajo amenaza

El presidente de Estados Unidos Joe Biden dijo que la democracia está amenazada en su país y en el extranjero y calificó de inaceptable la postura del expresidente Donald Trump sobre la OTAN, en su discurso sobre el Estado de la Unión diseñado para contrastar visiones con su oponente republicano en la elección de 2024.

Desde el presidente Lincoln y la Guerra Civil, nunca nuestra libertad y democracia habían sido atacadas como lo están hoy. Lo que hace que nuestro momento sea raro es que la libertad y la democracia están bajo ataque tanto en casa como en el extranjero.

Biden, ante una sesión conjunta de la Cámara de Representantes y el Senado, abrió su intervención con una crítica directa a Trump por unos comentarios en los que invitaba al presidente ruso, Vladímir Putin, a invadir otras naciones de la OTAN si no gastaban más en defensa.

Ahora mi predecesor, un expresidente republicano, le dice a Putin, cito: ‘Haz lo que quieras’. Creo que es indignante, peligroso e inaceptable.

Biden destacó las amenazas a la democracia que, según él, supone Trump, ya que el expresidente repite afirmaciones falsas sobre su derrota en las elecciones de 2020 y propone encarcelar a los enemigos políticos.

Mi vida me ha enseñado a abrazar la libertad y la democracia. Un futuro basado en los valores fundamentales que han definido a Estados Unidos: honestidad, decencia, dignidad, igualdad. Ahora algunas personas de mi edad ven una historia diferente: una historia americana de resentimiento, venganza y retribución. Ese no soy yo.

Trump, que se enfrenta a múltiples cargos criminales mientras busca la reelección, dice que planea castigar a los enemigos políticos y deportar a millones de migrantes si gana un segundo mandato en la Casa Blanca. El representante Troy Nehls, republicano, llevaba una camiseta con la cara de Trump y las palabras “Nunca te rindas”.

El presidente pregonó sus logros en infraestructura y manufactura, y presionó al Congreso para que apruebe más ayuda para Ucrania, normas migratorias más estrictas y precios más bajos de los medicamentos. También trató de recordar a los votantes la situación que heredó cuando asumió el cargo en 2021, en medio de una pandemia y con una economía en contracción.

El presidente, de 81 años, estaba siendo observado de cerca no sólo por su mensaje, sino por si sería capaz de transmitirlo con vigor y firmeza.