El presidente de la repùblica el Lic. Andrés Manuel López Obrador, aseguró que “no va a haber ningún problema” con el paro nacional que comenzaron este miércoles los jueces y trabajadores del Poder Judicial contra la reforma del Gobierno para elegir por voto popular a jueces y a la Suprema Corte.
Por: Agencias
Ciudad de Mèxico; jueves, 22 de agosto del 2024.- El mandatario federal señalò que “Se los digo porque luché durante muchos años contra el régimen: no pasa nada con su movimiento, no importa porque ellos no atienden a la población. Yo les diría que, al contrario, si los jueces, los magistrados y los ministros no están en activo, cuando menos no van a sacar los delincuentes de la cárcel“, expresó.
El mandatario se refirió en su conferencia matutina al paro que comenzó este miércoles la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (Jufed), por lo que solo atenderán casos urgentes y se mantendrán en funciones la Suprema Corte y el Tribunal Electoral.
Los trabajadores judiciales están en contra de la reforma constitucional que el Congreso prevé aprobar en septiembre, cuando el oficialismo controle dos tercios de los escaños, porque argumentan que la elección popular de jueces afectaría la carrera judicial y permitiría la intromisión de partidos y el crimen.
Pero López Obrador insistió en que los empleados “no van a salir perjudicados en nada, el asunto tiene que ver con la corrupción que hay arriba”.
El presidente consideró el martes “ilegal” la huelga de los trabajadores judiciales, a los que acusó el lunes de ser “paleros” de poderosos y corruptos, aunque ahora prometió que no habrá “represión”.
“Nosotros no reprimimos, no somos represores, porque no somos conservadores, ya les dije qué distingue al conservadurismo: uno, son muy hipócritas. Dos, son muy corruptos, les gusta mucho el dinero, les brillan los ojos por el dinero. Y tres, son muy autoritarios”, comentó ahora.
Finalmente, reiteró ante los asistentes a la conferencia en Palacio Nacional que la “esencia” de la reforma que presentó es que “el pueblo” elija a los jueces, porque asevera “es muy distinto si los elige el pueblo a si los eligen los altos funcionarios públicos, incluso el presidente”.