El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, defendió este viernes sus críticas a la reforma del Poder Judicial.
Esto ocurrió después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador lo acusara de mantener una “actitud intervencionista” y luego de que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) enviara una nota de protesta a la embajada estadounidense por los comentarios del diplomático.
“Las preocupaciones que expresé sobre la elección directa de jueces son en espíritu de colaboración. Como socios, buscamos un diálogo honesto y abierto para seguir con el gran progreso democrático y económico que hemos alcanzado”, ha publicado Salazar en sus redes sociales.
El jueves, el embajador realizó un inusual pronunciamiento en el que afirmó que la reforma judicial representa “un riesgo para la democracia en México”. Salazar detalló ante los medios que la propuesta, que será presentada al Congreso en los próximos días, contiene puntos débiles significativos y que la elección directa de los jueces podría aumentar la influencia del narcotráfico dentro del sistema judicial. “Las democracias no pueden funcionar sin un Poder Judicial sólido, independiente y libre de corrupción”, expresó. El diplomático justificó su declaración señalando que las nuevas disposiciones podrían poner en peligro la relación comercial entre México y Estados Unidos.