El documento destacó por otro lado un ligero aumento en el número de personas que enfermaron de tuberculosis (tanto diagnosticadas por primera vez como reinfectadas), pasando de los 10,6 millones registrados en 2022 hasta los 10,8 millones en 2023.
Cinco países concentraron más de la mitad de la carga mundial de tuberculosis: India (26 %), Indonesia (10 %), China (6,8 %), Filipinas (6,8 %) y Pakistán (6,3 %), lo cual, advierte la OMS, demuestra que esta enfermedad sigue afectando “de manera desproporcionada” a zonas en desarrollo.
“Que tantas personas sigan muriendo y enfermando de tuberculosis es una vergüenza cuando tenemos las herramientas para prevenir, detectar y tratar la enfermedad”, aseguró el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, al presentar el informe.
En el plano positivo, la OMS celebró un aumento de los casos diagnosticados el pasado año, hasta los 8,2 millones, superando así a los 7,5 millones de 2022 y alcanzando la cifra más alta desde que la organización iniciara el seguimiento mundial de esta enfermedad en 1995.
Según la OMS, este incremento ha sido posible gracias a los “considerables esfuerzos” realizados a nivel nacional y mundial para recuperarse de las perturbaciones en las redes de detección y prevención durante la crisis de la covid, especialmente en países con mayor incidencia de tuberculosis como India, Indonesia y Filipinas.
Más diagnóstico para la tuberculosis multirresistente
Pese a estos avances, el informe alerta de que la tuberculosis multirresistente, aquella que no responde a los principales tratamientos contra la enfermedad como la rifampicina, constituye todavía “una crisis de salud pública”.
Así, de las 400,000 personas que la agencia sanitaria de la ONU estima que padecían esta tuberculosis más grave hasta el pasado año, se calcula que sólo el 44 % fueron diagnosticadas y recibieron el correspondiente tratamiento en 2023.
La OMS advierte que uno de los principales obstáculos para combatir la tuberculosis sigue siendo el déficit de financiación mundial para su prevención y tratamiento, que disminuyó en 2023 hasta los 5,700 millones de dólares (5,289 millones de euros), muy por debajo de la meta anual de 22,000 millones de dólares (20,415 millones de euros).
No obstante, también apunta a otros cinco factores como los causantes del aumento del número de casos de tuberculosis a nivel mundial: la desnutrición, la infección por VIH, los trastornos por consumo de bebidas alcohólicas, el tabaquismo (especialmente entre los hombres) y la diabetes.
Ante esta situación, la OMS hizo un llamamiento a la comunidad internacional para abordar estos problemas desde raíz, combatiendo determinantes críticos como la pobreza o la baja renta per cápita de los países más afectados, y avanzar así en la erradicación de esta enfermedad.
EFE