El gobierno estadunidense cerró la exportación de esta especie, luego que se detectara en la frontera sur casos de infección del gusano barrenador

Con el cierre de la frontera de Estados Unidos a la exportación del ganado nacional en pie por la detección de becerros infectados con el gusano barrenador provenientes de Centro y Sudamérica, está en riesgo la exportación de más de 900 mil cabezas de ganado que representarían una pérdida superior a los 15 mil millones de pesos para la economía en México.

El domingo, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) confirmó la suspensión de la exportación del ganado nacional hacía Estados Unidos para prevenir problemas con animales afectados con el gusano barrenador, un parásito que podría contagiarse y propagarse entre el ganado de exportación nacional.

El gusano barrenador es una infestación provocada por las larvas de la mosca Cochliomyia hominivorax el gobierno de México reconoce que éste representa una grave amenaza para la salud del ganado y, en algunos casos, de otras especies de mamíferos, incluyendo al humano.

Esta infestación puede resultar devastadora, especialmente si no se detecta a tiempo. Con síntomas clínicos que incluyen fiebre, depresión e inapetencia, el gusano barrenador no sólo afecta el bienestar de los animales, sino que también impacta negativamente en la producción agrícola”, advierten publicaciones en el sitio en internet www.gob.mx.

Producto de las acciones de Sader para prevenir el ingreso del gusano barrenador al ganado en México, funcionarios interceptaron en Catazajá, Chiapas, un animal que resultó positivo en un cargamento originado fuera del territorio nacional”, dicta el boletín oficial.

PARÁSITO SE DETECTÓ EN UNA INSPECCIÓN EN LA FRONTERA SUR DE MÉXICO

Los análisis de laboratorio donde se detectó este parásito, ocurrieron en el Punto de Verificación e Inspección Federal ubicado en la frontera sur de México.

Como medida precautoria, el Departamento de Agricultura de EU pausó temporalmente la internación de ganado mexicano a su país”, reconoció la Sader.

Según la Sader, las autoridades sanitarias en EU y México trabajan en la aplicación de medidas para retomar el flujo normal de las exportaciones mexicanas: “Éstas no se aplican a otras exportaciones de nuestra agricultura y están limitadas al ganado en pie”, agregó.

Al cierre del último ciclo ganadero 2022-2023, México exportó 908 mil 729 reses, de las cuales 332 mil fueron de Chihuahua; 271 mil, de Sonora; 171 mil, de Durango; 54 mil, de Tamaulipas, y 31 mil, de Nuevo León, que son las cinco entidades líderes del ramo.

Considerando que en la presente temporada invernal se pudieran superar las 900 mil cabezas de ganado comercializadas en el extranjero a un precio promedio de 125 pesos por kilo —las reses de exportación pesan entre 300 a 600 libras—, se estima que, con el cierre de la frontera a la exportación con EU, los productores mexicanos registren pérdidas superiores a 15 mil 300 millones de pesos.