La misma casa la vendían cientos de veces y fue de miles y miles de viviendas el tamaño de la transa

El saqueo al INFONAVIT, es decir al dinero de los trabajadores alcanza varios miles de millones de pesos y están embarrados gobernadores, notarios públicos, empresario, líderes sindicales y funcionarios, así lo dio a conocer Octavio Romero Oropeza titular del INFONAVIT en la mañanera

Por: Arcelia García Ortega 

Tepic, Nayarit; jueves, 19 de diciembre del 2024.- El director general del Instituto del Fondo Nacional de Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), Octavio Romero Oropeza, declaró en conferencia de prensa que, tanto el Sector Empresarial, como el de los Trabajadores, se han opuesto a la fiscalización de la Auditoría Superior, al grado de ordenar a la anterior Dirección General del Infonavit a ampararse contra sus resolutivos.

Y solo por citar un ejemplo de la corrupción imperante, mencionó que se contrató a la empresa Telra Realty en el año 2014 diseñar y operar una plataforma para administrar soluciones de vivienda de acreditados que cambian de lugar en donde residían. Y el monto del contrato era de 100 millones de pesos, pero nunca, en dos años, estableció la plataforma. Debió haber sido penalizada en ese momento, porque no cumplió, pero contrario a ello, no solo no se le penalizó, sino que el Consejo de Administración autorizó el pago de una indemnización por un monto de 5 mil millones de pesos. Increíble.

La empresa estaba conformada por cinco socios: Dos socios de Telra devolvieron 2 mil millones de pesos cuando se dieron cuenta que estaba en medio chueco el asunto, pero tres se han negado a devolver 3 mil millones restantes, esos 3 mil millones andan “volando”.

Hay otro ejemplo de muchos, empresa recibió recursos para comprar el terreno, para pagar licencias y permisos de construcción, y para hacer infraestructura, a pesar de que no hizo las viviendas, junto con otras tres empresas, recibió adicionalmente: 45 millones una, 22 otra, 9 millones otra, 5 millones otra, dinero adicional, ya no del Fondo directamente del Infonavit, sino de los créditos de los trabajadores. Es decir, sin haber construido la vivienda, se les empezó… se les otorgó crédito a los trabajadores y se les empezó a descontar de su dinero. Se les estaba cobrando por una vivienda que no se les había entregado.

Hoy, los trabajadores no pueden disponer de dinero, ni tienen la vivienda porque no la terminaron, ni pueden sacar lo de un crédito, están sin vivienda, tienen congelado porque tienen atrapado su crédito.

Existe una red delictiva donde intervienen trabajadores del Infonavit, notarios, despachos y peritos valuadores que se han coludido a fin de otorgar múltiples créditos sobre una misma vivienda, aseveró el titular del INFONAVIT

Con la revisión hasta hoy, que no incluye 11 estados del país, se han detectado 12 mil créditos sobre mil 400 viviendas, lo que significa que estas se vendieron hasta cuatro veces cada una por año.

La estafa a los trabajadores asciende a los mil 200 millones de pesos.

Resulta increíble la corrupción imperante, y eso que no se ha revisado todo: 

En el Estado de México, tres notarios, con dos despachos de evaluación, con tres peritos valuadores, con tres controladores y seis trabajadores del Infonavit: vendieron 496 casas 4 mil 130 veces.

En Jalisco, tres notarios, un despacho, un perito, un controlador, dos trabajadores del Infonavit: vendieron 239 casas 2 mil 37 veces.

En Baja California, 205 casas se vendieron mil 696 veces.

Y así sucesivamente, lo que nos da las mil 400 y las 12 mil ventas.

Tlaxcala es relevante porque aquí 35 casas se vendieron casi 800 veces. Y aquí operó, al igual que en Sonora: un notario, un despacho, un perito, un controlador y un trabajador del Infonavit. Es decir, la red está más que clara de cómo operan, son las mismas personas.

En el Estado de México hay dos notarios que en esta red resultan relevantes; porque este notario, el notario 1: 240 casas las vendió casi mil 600 veces, desde luego en conjunto con la red.

El notario 2, también del Estado de México: 158 casas, 937 veces.

En la mañanera salió a relucir el caso Nayarit, por el que el ex presidente del Tribunal de Justicia, Pedro Soto, está preso.

Oropeza, recordó que entre 2013 y 2015, despachos, en contubernio con diversos funcionarios del Poder Judicial y notarios de Nayarit, realizaron juicios fraudulentos en contra de 60 mil derechohabientes. 

Un derechohabiente que vivía y tenía su casa en Chiapas fue notificado irregularmente en un domicilio en Nayarit, dentro de un juicio tramitado en el estado de Nayarit. Esto provocó que el derechohabiente quedara en estado de indefensión, pues nunca se enteró de que era parte de un juicio; es chiapaneco y lo notifican en Nayarit, como si rentara algún domicilio que quién sabe de quién era.

El Infonavit no recuperó ninguna vivienda y miles, y esto es lo peor, miles de derechohabientes fueron despojados de su vivienda sin un juicio justo, con todas estas irregularidades. Lo anterior, como en todos los casos de corrupción, sin que la Comisión de Vigilancia o el Comité de Auditoría tomara acciones en contra de los responsables.

Y parece interminable la lista: funcionarios del Infonavit contrataron ilegalmente un seguro de vida colectivo por 550 millones de pesos para los derechohabientes con crédito. Ilegalmente, Porque el Instituto, el Infonavit, ya cubre ese seguro.

La cobertura en esa época era contra riesgos de fallecimiento de las personas acreditadas solo en caso de desastre natural y de pandemias —se adelantaron al COVID—, lo que hacía que esta póliza fuera incobrable. Es decir, su contratación fue fraudulenta y, ojo, sin el consentimiento de los trabajadores acreditados, y sin necesidad porque ya el Infonavit cubre eso.

El Consejo de Administración de Infonavit conformó un fideicomiso y las utilidades que se debieron reintegrar el fondo de ahorro de los trabajadores, se las repartieron entre los integrantes.

Cabe destacar que el ingreso neto anual de la presidenta de la República anual es de un millón 992 mil pesos; esto es, mensual, vienen siendo 140 mil pesos, aproximadamente.

 El director Sectorial de los trabajadores, gana anual,3 millones 255. Mucho más que lo que gana la presidenta: mensual 271 contra 140.

Eso sin considerar que les pagan a 60 mil pesos que vayan al Consejo.

La Dirección Sectorial Empresarial, tiene un ingreso mensual de 262 contra 140; y sus subalternos o los niveles inferiores, también con un ingreso neto mensual superior al de la presidenta de la República.

En el caso del secretario general del Sindicato de los Trabajadores del Infonavit, tiene un ingreso anual neto de 2.2 millones, que equivale a 185 mil pesos mensuales; superior al salario de la presidenta.

Todo esto se paga con el ahorro de los trabajadores. Se van a presentar más denuncias de todo lo citado y todo lo que se encuentre.

Y aún hay más…esto fue lo que añadió el titular del INFONAVIT: el Fondo de Vivienda de los Trabajadores tiene como finalidad que el trabajador tenga derecho a un crédito para vivienda, pero hay trabajadores que no ocupan ese Fondo para Vivienda porque a lo mejor heredaron una casa, no necesitan la vivienda.

Ese dinero, el día que ellos se retiren, se va a su jubilación, no se pierde; siempre es de ellos, lo ocupan para vivienda o lo ocupan para su jubilación.

Muchos trabajadores no saben que tienen ese dinero y hay muchos “coyotes” que se aprovechan del desconocimiento de los trabajadores para decirles: “Oye, yo te saco tu dinero del Infonavit porque, si no, se lo va a quedar el gobierno”. Engañan al trabajador.  “Claro, yo te lo saco —a través de estas redes de complicidad— pero te quito el 30 o el 40 por ciento de ese monto”.

Entonces, el trabajador engañado a veces acepta la operación: se saca el dinero a través de esta red de corrupción, se saca el crédito, se compra una casa, se vuelve a vender, se le da el dinero al trabajador menos su 40 por ciento correspondiente.

Y como esto es múltiple, se crea un fraude tipo “pirámide” en donde, al final del día, el último es el que va a pagar.

Hemos descubierto casos, en el caso de la venta masiva, en donde al final empiezan a suplantar identidades: agarran el nombre de un derechohabiente, que ni siquiera sabe, le falsifican los documentos y sacan el crédito a su nombre para empezar a tapar los huecos que se van generando.

Pero, entonces, es parte de un engaño, y es importante que los trabajadores sepan que su dinero está absolutamente seguro, y que lo pueden usar para adquirir vivienda o para su retiro en el caso de que no requieran la vivienda.