Alejandro Padilla, senador por el estado de California y primer legislador de origen latino en representar a este estado en el Senado, fue detenido y esposado por la fuerza tras interrumpir una rueda de prensa ofrecida por la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem. El incidente tuvo lugar en un edificio federal del oeste de Los Ángeles.
Por: Agencias
Los Angeles, California, viernes, 13 de junio del 2025.- El Departamento de Seguridad Nacional calificó la acción de Padilla como “un teatro político irrespetuoso”, ya que interrumpió “una conferencia de prensa en vivo”. En su declaración, la institución destacó que el senador se abalanzó sobre la secretaria Noem sin identificarse y sin llevar puesto su pin de seguridad del Senado.
Este suceso ha generado reacciones y discusiones sobre el comportamiento de los legisladores en eventos oficiales y la importancia del respeto en situaciones de comunicación pública. El Departamento de Seguridad Nacional explicó que “al senador Padilla le ordenaron repetidamente que retrocediera” y que no cumplió con las instrucciones de los oficiales, lo que llevó al Servicio Secreto a pensar que estaba actuando como un atacante. En consecuencia, los oficiales intervinieron de manera apropiada. Después del altercado, se llevó a cabo una reunión de 15 minutos entre la secretaria Noem y el senador.
Un video compartido en redes sociales muestra al senador Padilla, miembro del Partido Demócrata, diciendo en medio del forcejeo: “Soy el senador Alex Padilla. Tengo preguntas para la secretaria”, antes de ser sacado a empujones por varios agentes de seguridad presentes en el lugar.
La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, criticó en una publicación en X el tratamiento que recibió Padilla, calificándolo de “absolutamente aborrecible y escandaloso”, subrayando que se trataba de un “senador en funciones”. Además, expresó su preocupación porque este tipo de incidentes se suman a los “ataques violentos” que la administración de Donald Trump ha llevado a cabo contra la ciudad.
Este episodio ha levantado un intenso debate sobre la seguridad de los funcionarios y el respeto debido a su cargo, así como la forma en que se manejan las interacciones entre legisladores y autoridades durante eventos oficiales.