Londres, 18 de junio de 2025 — La princesa de Gales, Kate Middleton, no asistió al Royal Ascot, uno de los eventos más emblemáticos del calendario social británico, debido a su delicado estado de salud mientras continúa su recuperación tras el tratamiento contra el cáncer.
A pesar de haber reaparecido públicamente hace unos meses y anunciar que se encuentra en remisión, fuentes cercanas al Palacio de Kensington aseguraron que Kate aún busca “el equilibrio adecuado” entre sus compromisos oficiales y su bienestar personal. La princesa estaba incluida en la lista inicial de la procesión real y se esperaba que compartiera el segundo carruaje junto a su esposo, el príncipe William. Sin embargo, su nombre fue retirado minutos antes del inicio del evento.
Kate, de 43 años, expresó sentirse “decepcionada” por no poder asistir, aunque sigue enfocada en su recuperación física y emocional. La futura reina ha retomado de forma gradual su agenda pública luego de revelar en enero pasado que estaba libre de cáncer, tras recibir quimioterapia desde febrero de 2024 para un tipo de cáncer que no ha sido especificado públicamente.
En su ausencia, su madre, Carole Middleton, representó a la familia junto a su nuera Alizée Thevenet, esposa de James Middleton, hermano de Kate. La última aparición pública significativa de la princesa fue en el Royal Marsden Hospital, donde brindó apoyo a pacientes oncológicos como parte de su compromiso con causas relacionadas con la salud.
El príncipe William, por su parte, ha descrito el 2024 como un año “brutal” para la familia real, marcado no solo por la enfermedad de su esposa, sino también por el diagnóstico de cáncer de su padre, el rey Carlos III.
Kate Middleton continúa enfocada en su recuperación y en hacer todo lo posible para permanecer libre de cáncer, mientras equilibra con cautela su retorno a la vida pública.