Britney Spears corre el riesgo gastar su fortuna de 60 millones de dólares después de despilfarrar más de un millón de dólares en cada uno de sus viajes mensuales a la Polinesia Francesa y Hawaii.

De nueva cuenta Britney Spears esta en el ojo del huracán luego de que millones de fans se percataran de que la famosa eliminó su cuenta de Instagram poco después de publicar un mensaje impactante dirigido a su familia.

De acuerdo con TMZ, amigos cercanos de la cantante la describieron como “completamente disfuncional” y expresaron su preocupación por su estado mental y financiero, que, según ellos, ha empeorado desde que terminó su tutela a cargo de su padre.

Según fuentes cercanas, Britney Spears, de 41 años, está experimentando “cambios de humor radicales e impactantes” y se está volviendo cada vez más aislada.

Una fuente compartió a TMZ que quienes han permanecido cerca de la estrella creen que su situación era mejor cuando estaba bajo tutela, la cual terminó en 2021.

“Tenía mucha libertad dentro de la tutela, y las restricciones estaban allí para protegerla. Ahora que no está bajo esa protección”, explicaron.

Según informes, Britney Spears corre el riesgo gastar su fortuna de 60 millones de dólares después de despilfarrar más de un millón de dólares en cada uno de sus viajes mensuales a la Polinesia Francesa y Hawaii, como lo ha compartido en sus redes sociales.

Además, lo ha estado derrochando en jets privados y resorts de cinco estrellas para sus vacaciones habituales.

En su última publicación de Instagram antes de eliminar su cuenta, Britney arremetió contra su familia tras su reciente acuerdo con su padre, Jamie Spears.

“¡¡Mi familia me ha lastimado!!! ¡¡¡No ha habido justicia y probablemente nunca la habrá!!! ¡¡¡Las personas que se quedaron de brazos cruzados mientras eso sucedía durante cuatro meses están prosperando!!”, expresó.

Hace una semana, la cantante resolvió su larga batalla legal con su padre, Jamie, de 71 años, sin embargo, Britney deberá pagar la factura legal de 2 millones de dólares de Jamie, además de los 4 millones de dólares que supuestamente gastó en su propio abogado.