Zitácuaro, Michoacán.– Una jornada violenta sacudió a la ciudad de Zitácuaro este jueves, luego de que enfrentamientos entre grupos armados pertenecientes a cárteles rivales provocaran pánico entre la población. El saldo: un niño de cinco años muerto y tres personas más —su madre y dos hermanitos— gravemente heridas tras quedar atrapados en el fuego cruzado.
De acuerdo con reportes de la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán, los tiroteos comenzaron alrededor de las 12:30 del día en diversas colonias, principalmente en Lomas de Oriente y el Libramiento J. Múgica. Durante más de ocho horas, las calles se convirtieron en campos de batalla, con ráfagas de alto calibre escuchándose por toda la zona urbana.
Además de las balaceras, los grupos criminales atacaron tres tiendas de conveniencia —una fue incendiada y dos más baleadas—, y realizaron bloqueos con vehículos en las carreteras hacia Morelia, Toluca y Huetamo. Un autobús también fue incendiado como parte de estas acciones de terror.
Fue pasada la 1:00 de la tarde cuando los servicios de emergencia localizaron a una familia herida dentro de un vehículo compacto. En el interior, encontraron a una mujer de 25 años y sus tres hijos; lamentablemente, uno de los menores, de apenas cinco años, había perdido la vida. Los otros dos niños, de 10 y 4 años, resultaron gravemente lesionados.
La Fiscalía General del Estado confirmó el deceso del menor y las heridas sufridas por su familia. Según fuentes policiales, el violento enfrentamiento es parte de la disputa territorial entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y La Familia Michoacana, quienes buscan el control de actividades ilícitas en regiones limítrofes con el Estado de México y Guerrero.
Este hecho se suma a una escalada de violencia registrada en las últimas semanas en municipios como Tiquicheo, Tuzantla y Juárez, donde incluso la Presidencia Municipal fue atacada recientemente con explosivos lanzados por drones.
Hasta la noche de este jueves, las autoridades no habían logrado retirar por completo los bloqueos ni sofocar los enfrentamientos armados, generando un clima de miedo e incertidumbre entre los habitantes de Zitácuaro.
