Tallahassee, Florida – Más de un centenar de migrantes fueron arrestados en una redada llevada a cabo en un sitio de construcción cerca de la Universidad Estatal de Florida, en Tallahassee. La operación, liderada por la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) de Tampa, con apoyo de la Patrulla de Carreteras de Florida, se convirtió en la segunda intervención de este tipo en menos de un mes en el estado.
Los detenidos, originarios de México, Colombia, Guatemala, Nicaragua, El Salvador y Honduras, fueron sorprendidos mientras trabajaban en la construcción de un complejo de apartamentos. Según las autoridades, entre los arrestados se encuentran personas que ya habían sido deportadas anteriormente, así como individuos con antecedentes criminales.
Videos difundidos en redes sociales por organizaciones como la Coalición Inmigrante de Florida (FLIC, por sus siglas en inglés) muestran escenas dramáticas del operativo, incluyendo a una mujer llorando mientras agentes se llevaban a su esposo, y a los migrantes siendo obligados a formar una larga fila.
El fiscal general del estado, James Uthmeier, celebró la redada en sus redes sociales, subrayando que Florida “está liderando el trabajo para ayudar a la Administración Trump a implementar la ley inmigratoria federal”. “Detener. Deportar. Entregar resultados al pueblo estadounidense”, escribió.
Esta redada se suma a un patrón creciente de operativos contra trabajadores migrantes en la industria de la construcción en Florida. Apenas dos semanas antes, más de dos docenas de indocumentados fueron arrestados en la ciudad de The Villages. Además, el mes pasado, ICE realizó un operativo récord con más de 1.100 detenciones en el estado en tan solo una semana.
Activistas y defensores de los derechos de los migrantes han condenado estas acciones, calificándolas de inhumanas y represivas, y advirtiendo sobre el impacto emocional y económico que tienen en las comunidades afectadas.