Julian McMahon, actor australiano reconocido por interpretar al icónico villano Doctor Doom en las películas de Los Cuatro Fantásticos, falleció el pasado 2 de julio en Clearwater, Florida, a los 56 años, tras una batalla privada contra el cáncer.

La noticia fue confirmada por su esposa, Kelly McMahon, a través de un comunicado compartido con el medio Deadline:
“Julian amaba la vida. Amaba a su familia. Amaba a sus amigos. Amaba su trabajo y a sus fans. Su mayor deseo era llevar alegría a tantas vidas como fuera posible. Pedimos apoyo en este momento para que nuestra familia pueda vivir su duelo en privacidad. Y deseamos que todos aquellos a quienes Julian les trajo alegría, sigan encontrando alegría en la vida. Estamos agradecidos por los recuerdos.”

Nacido el 27 de julio de 1968 en Sídney, Australia, Julian Dana William McMahon fue hijo de Billy McMahon, quien se desempeñó como primer ministro de Australia entre 1971 y 1972. Antes de iniciar su carrera como actor, McMahon trabajó como modelo, lo que le permitió abrirse paso en la televisión australiana con su debut en la telenovela The Power, the Passion (1989), seguido de su participación en Home and Away.

Su carrera internacional despegó al mudarse a Estados Unidos, donde integró el elenco de la telenovela Another World (1993). Más tarde, alcanzó la fama mundial como Cole Turner en la exitosa serie Charmed, interpretando al misterioso humano poseído por el demonio Belthazor. Posteriormente, brilló como el cirujano plástico Dr. Christian Troy en Nip/Tuck, papel que le valió una nominación al Globo de Oro.

En el cine, McMahon es recordado principalmente por encarnar al villano Doctor Doom en Los 4 Fantásticos (2005) y su secuela Los 4 Fantásticos y Silver Surfer (2007).

En años recientes, participó en los filmes The Surfer y The Supremes at Earl’s All-You-Can-Eat, así como en la serie de Netflix The Residence, donde interpretó al Primer Ministro de Australia, en un claro guiño a su historia familiar.

McMahon también protagonizó la serie FBI: Most Wanted, consolidando una carrera marcada por la versatilidad y el carisma en pantalla.

Su legado como actor, así como el cariño de sus seguidores y colegas, perdurará como testimonio de una vida dedicada al arte y la interpretación.