El Tottenham Hotspur escribió una nueva página dorada en su historia al conquistar por primera vez la UEFA Europa League, tras vencer 1-0 al Manchester United en una intensa final disputada en el estadio de San Mamés, en Bilbao, España.

El único tanto del encuentro lo marcó Brennan Johnson, quien aprovechó un centro desde la banda para definir dentro del área. El balón, tras rozar en el brazo de Luke Shaw, se coló por el primer poste del arquero André Onana, desatando la euforia de los ‘Spurs’ en el minuto 29.

Más allá del gol, el partido fue una batalla física, con pocas concesiones y mucho ritmo, en la que el conjunto londinense mostró una sólida disciplina táctica. El Manchester United, que tuvo momentos de dominio con Bruno Fernandes como cerebro y Amad Diallo desequilibrando por la derecha, no logró romper la resistencia del arquero Guglielmo Vicario, figura clave del triunfo.

En la segunda parte, el equipo de Erik ten Hag lo intentó con todo su arsenal ofensivo, pero se encontró con una defensa férrea. Una jugada clave fue al minuto 68, cuando Miky van de Ven salvó sobre la línea un cabezazo de Rasmus Højlund. Ya en el tiempo de compensación, Vicario volvió a ser decisivo al detener un remate de cabeza de Luke Shaw que pudo cambiar la historia.

Con este triunfo, el Tottenham se consagra campeón europeo por primera vez desde 1984 y se asegura su lugar como el sexto representante inglés en la próxima edición de la UEFA Champions League. Además, disputará la Supercopa de Europa este verano ante el ganador de la Champions League, Inter de Milán o París Saint-Germain.

El equipo dirigido por Ange Postecoglou, que ya había vencido al United en sus tres enfrentamientos previos de la temporada (Premier League y Copa de la Liga), cerró una campaña memorable siendo la auténtica pesadilla de los ‘Red Devils’.