Cada 7 de noviembre se conmemora en nuestro país el día del ferrocarrilero, decretado oficialmente por el entonces presidente de México Manuel Ávila Camacho para el año de 1944, hecho que buscó honrar a todos los trabajadores ferroviarios en su labor de servicio diario a los pasajeros.
Dicho festejo, tiene como trasfondo una trágica historia que hoy en día es conocida como la del “Héroe de Nacozari” ahora internacionalmente reconocido este personaje como “Héroe de la Humanidad”, por la American Royal Cross of Honor de Washington, en honor a un maquinista de 26 años que espontáneamente ofrendó su vida un día 7 de noviembre de 1907, al sacar valientemente del pueblo de Nacozari, Sonora, un tren cargado con dinamita que ya se estaba incendiando, salvando la vida de sus habitantes.
Jesús García Corona, se percató en aquel entonces del fuego que salía del fogón próximo a un compartimiento que se encontraba cargado de la dinamita que debía ser transportada a la mina de Pilares, y decidió operar el tren, “la máquina 501”, lejos del pueblo de Nacozari para evitar una catástrofe.
Pronto se escuchó una gran explosión que afortunadamente no dañó el poblado de Nacozari. Sin embargo, el joven maquinista Jesús García, junto con otras 12 persona que se encontraban cerca, perdieron la vida.