Villahermosa, Tabasco – La madrugada del lunes, el sacerdote Héctor Alejandro Pérez, párroco de la iglesia San Francisco de Asís en la colonia Gaviotas Sur, fue víctima de un ataque armado al salir de la casa parroquial para visitar a un enfermo. El atentado, que ocurrió alrededor de las 5:45 a.m., dejó al religioso gravemente herido.

La Diócesis de Tabasco informó que el ataque podría haber sido producto de una confusión con otra persona. El sacerdote fue intervenido quirúrgicamente y actualmente se reporta en estado “muy grave”, con pronóstico reservado debido a la complejidad de las heridas internas y la pérdida de sangre.

El parte médico detalla que el padre Pérez sufrió una fractura expuesta de húmero, lesiones en el diafragma, el hígado, el colon y un vaso sanguíneo que tuvo que ser extirpado, además de haber perdido aproximadamente un litro de sangre. Actualmente permanece intubado y se prevé que continúe así al menos por 72 horas, aunque su estado neurológico se reporta como estable.

La Diócesis lanzó un llamado urgente a la donación de sangre para el sacerdote, quien permanece hospitalizado en el Hospital Rovirosa de Villahermosa.

Ante este hecho, el obispo Gerardo de Jesús Rojas López condenó enérgicamente la agresión, calificándola como un acto de barbarie, e hizo un llamado a la paz: “Que todos los fieles y personas de buena voluntad se unan en la búsqueda de la paz para nuestro querido Tabasco”.

La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) también se pronunció, calificando el atentado como un “cobarde ataque armado” y expresando su solidaridad con la Diócesis de Tabasco, así como con la comunidad parroquial y los familiares del sacerdote.

Por su parte, el gobernador de Tabasco, Javier May, aseguró que se están realizando las investigaciones correspondientes y prometió que “pronto habrá resultados” y que el caso no quedará impune.