“Quiero que me recuerden como el presidente que no robó y que no dejó que nadie robara”, dijo el presidente de El Salvador, quien busca la reelección
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha pedido este martes al fiscal general del país, Rodolfo Delgado, que investigue a todo su gabinete para demostrar su compromiso contra la corrupción incluso dentro de su Gobierno, y prometió abrir una prisión para políticos y funcionarios corruptos.
“Le quiero pedir (al fiscal general) en público que investiguemos a todos los que están acá, para atrás y para adelante”, ha declarado Bukele durante un discurso televisado y recogido por el diario salvadoreño ‘El Mundo’. “Yo no voy a ser el presidente que no robó pero se rodeó de ladrones. Quiero que me recuerden como el presidente que no robó y que no dejó que nadie robara, y al que robó lo metió a la cárcel. Ya hay un par que está en la cárcel”, ha añadido, haciendo referencia al expresidente José Napoleón Duarte, quien “se rodeó de ladrones” y que “manchó su legado por rodearse de ladrones”.
Durante su intervención, el mandatario ha temido “dejar un mal legado” e incluso ha anunciado la construcción de un “Centro de Confinamiento de la Corrupción”, una prisión exclusivamente para políticos y funcionarios corruptos. En ese sentido, ha prometido destituir a cualquier funcionario de su Gobierno que cometa “ilegalidades”.
Por su parte Delgado dijo en su cuenta de X: “Cuando el fiscal general era un simple títere de los que buscaban mantener sometido al país a sus antojos, las investigaciones de los funcionarios de turno se retrasaban, manipulaban o, incluso, se engavetaban. Si pensaron que seguiríamos actuando igual, se equivocaron. Quien sea que haya cometido delito, será perseguido y punto”.
Bukele pedirá licencia para buscar su reelección en El Salvador
Por otro lado, Bukele aseguró que solicitará a la Asamblea Legislativa del país una autorización para dejar la Presidencia y poder dedicarse a la campaña electoral de cara a las elecciones presidenciales, que tendrán lugar en febrero de 2024. Explicó que, a pesar de no estar en el cargo, podrá dedicar “más tiempo” para evaluar la situación del país y que estará “24 horas al día para estar preguntando cómo están las cosas”.
“Como todos ustedes saben, en aproximadamente tres días voy a pedir una licencia a la Asamblea Legislativa para dedicarme a la campaña y no voy a estar en funciones como presidente, yo quería hacer una reunión antes para ver un par de temas importantes”, ha indicado Bukele.
La candidatura de Bukele a la reelección presidencial ha causado críticas entre los sectores opositores del país debido a que la Constitución del país centroamericano, en vigor desde el año 1983, establece a lo largo de seis artículos la teórica prohibición de dos mandatos presidenciales consecutivos, pero cuenta con una aprobación superior al 70% y podría ganar las elecciones hasta con un 90% por ciento de los votos.
Sin embargo, una decisión del Tribunal Constitucional abre la puerta a la posibilidad de que Bukele renuncie a su cargo seis meses antes de concluir su mandato, es decir, el 30 de noviembre, para poder presentarse a las elecciones. Las elecciones serán el 4 de febrero de 2024, pero la toma de posesión tendrá lugar el 1 de junio.
Bukele ha impulsado en los últimos años una contundente “guerra contra las pandillas” en virtud de la que ha encarcelado a decenas de miles de presuntos pandilleros y ha tratado de erradicar cualquier rastro que hayan dejado en la sociedad salvadoreña, incluidos mausoleos y tumbas. A pesar de estas duras medidas, las encuestas respaldan rotundamente al mandatario y su estrategia de seguridad, e incluso abogan por recrudecer aún más las medidas.